martes, 30 de abril de 2013

Último día en Tokyo


Es nuestro último día en Tokyo y además amanece con algo de lluvia


Para hoy tenemos planeado visitar la zona de Ueno, donde hay un parque con varios templos y estatuas importantes.




Aquí uno muy divertido con varios gatitos ¿Qué representarán los baberos? ¡Y no os perdáis el detalle de la lámpara con impermeable!


Entre las estatuas famosas, la más importante es este señor feudal o Shogun


Aquí también vimos algunos cerezos en flor ¡qué bonitos!


Después del paseo decidimos volver al centro de Tokyo



Y comprarnos algo de sushi para tomarlo en los jardines del palacio imperial


Nos queda una tarde en Tokyo ¿qué tal si vamos al centro de turismo para preguntar qué más podemos hacer?

Le contamos a la azafata que es nuestra última tarde en Tokyo y queremos que nos recomiende algo para hacer, así que sacamos el mapa y vamos señalando las zonas que hemos visitado.

¡Pero si habéis visto todo lo importante!

Bueno, esta es la cara de Irene al saber que no se nos olvidaba nada


(en realidad nos ha faltado entrar al palacio imperial y tampoco hemos visitado ningún museo, nosotros somos más de pasear)

¿Y qué hicimos esa tarde? Pues nos fuimos al parque zoológico de Ueno, que tiene una pareja de pandas muy famosa:


¡Y también un oso polar muy jueguetón!



Para terminar el día: lavadoras, unas compras y noodles para cenar (espaguetis)


Mañana viajamos temprano a Takayama. ¡Cómo hemos disfrutado en Tokyo!

lunes, 29 de abril de 2013

Nuestro primer almendro en flor


El día empezó cogiendo nuestro primer tren bala (shikansen) para irnos a Nikko
La verdad es que Japón parece una linea enorme de tren rodeada de un país. Yo creo que estaban aquí incluso antes que los samurais


Al llegar nos encontramos con un pueblo precioso lleno de detalles




Este pueblo es muy famoso por varias cosas: para empezar, un puente rojo que solo pueden usar los nobles (o aquellos que paguen la entrada)


También son famosos su templos, que están rícamente decorados. 



Aquí tuvimos la suerte de encontrarnos nuestro pirmer almendro en flor:


Y aprovechamos para purificarnos bajo su sombra


En el siguiente templo entramos a rezar y nos contaron, en japonés, la historia del templo. En realidad solo queríamos entrar a mirar, porque dentro hay pinturas y objetos curiosos, pero la historia en japonés era obligatoria


Entre todos estos templos encontramos tabmién una pagoda, posiblemente la más bonita de las que hemos visto hasta ahora. Los 5 pisos de la pagoda representan la tierra, el agua, el fuego, el aire y el cielo.



¡Incluso había unos monitos muy simpáticos!! (tenéis que mirar encima de nuestras cabezas)



Después de tanto templo y paseo por el campo, nos merecíamos una comida y probamos nuestras primeras yakitoris (pinchitos) ¡Qué rico!


Para terminar el día en Nikko, tocaba un paseo por el río para ir a buscar los Jinzos, unas estatuas de piedra que alguien ha decorado con gorrito y babero. Los Jinzos son dioses/espíritus protectores de los niños y aquí hay muchas leyendas sobre unos que cambian de cara para sorprender a los viajeros



De vuelta en Tokyo despuesde de un día agotador, fuimos a buscar la cena cerca del hotel. Hoy queríamos probar el curry japonés, que es algo más dulce que el hindú y no pica tanto :)


¡Buenas noches!

domingo, 28 de abril de 2013

Domingo en Tokyo: Yoyogi Park

El domingo en Tokyo es imprescindible visitar el Yoyogi Park alrededor del mediodía, así que nosotros empezamos visitando el ayuntamiento de Tokyo:


Esta es una foto panorámica de la plaza del ayuntamiento: parece traída del futuro


Y desde arriba ¡unas vistas espectaculares!


La pena es que había una especie de niebla en el horizonte y no se veía el monte Fuji. ¡Vaya lío nos traemos con el montecito!

Al bajar volvimos a la estación de Shinjuku ¡Vaya estaciones tan grandes! Para que os hagáis una idea, este es el mapa de las salidas de la zona noroeste.


A pesar de todos los mapas y de nuestra habilidad con el Japonés fluído, nos pasamos un rato en la estación intentando llegar a otro barrio... y como no había manera humana de salir por donde queríamos, pues continuamos nuestro camino hacia el Yoyogi Park.

Al llegar nos encontramos con un espectáculo muy interesante: una de las bandas que se suele reunir allí estaba celebrando el día del orgullo gay.



También nos encontramos con una manifestación. Incluso para esto, los japoneses son civilizados: los manifestantes iban gritando consignas y levantando el puño, pero ninguno se salía de la linea de su carril :)


Y por fin ¡a disfrutar del parque yoyogi! Es como un gran día de campo de muchísima gente jugando al badminton, al disco, la comba, la pelota, cometas...




 Y desde algún punto del parque-bosque, un trocito de Tokyo


Como en todo buen día de campo, no puede faltar la comida, y nosotros decidimos comprar algunas cosillas en los puestos del parque. No sabemos cómo se llaman, pero estas son nuestras caras al probarlos:




Este último era como un churro cubierto por miel o almíbar y con un trocito de alga encima


Al salir, dos sorpresas más: los rockabilly (tenemos video también) y un señor disfrazado de sombrerero loco



Después de un día de campo, nos fuimos a la calle de la moda, donde además de mucha más gente disfrazada


Pudimos disfrutar del típico crepe de la zona


Para continuar el día, nos fuimos al barrio de Roppongi, un conjunto de rescacielos con centros comerciales muy pijos donde había también espectáculos callejeros. Aquí unas jirafas muy divertidas


Y aquí un teatro que iba asustando a los niños y divirtiendo a los mayores


¿Se verá ahora el monte Fuji desde el Ayuntamiento? Corre que te corre, porque estaba atardeciendo, volvimos a aquella megaestación de Shinjuku para subir esta vez a la torre norte del ayuntamiento. Las vistas eran preciosas:


Y aunque no lo creáis, se veía la puntita del monte Fuji (es la sombra más alta que aparece en la foto)


Para terminar, nos fuimos a cenar cerca de nuestro hotel. Hoy queríamos repetir sushi y luego probamos unas gyosas fritas. Eso sí, siempre que paso por un Hard Rock Café me tengo que hacer una foto y mandársela a Tomás ¡Buenas noches!!